El acceso a un medio ambiente adecuado para nuestro desarrollo es un derecho constitucional y, como tal, también exige unas responsabilidades. El ordenamiento jurídico y la legislación medioambiental española cuenta con una serie de normas con las que se quiere garantizar la protección del entorno natural. Desde leyes para la conservación de la biodiversidad a la ley de residuos y suelos contaminados, pasando por la ley de calidad del aire o la ley de aguas, se trata de asegurar el mantenimiento de los ecosistemas, de los que formamos parte también los humanos, para favorecer unas condiciones de vida saludables para todos.
El derecho ambiental nunca ha cobrado tanta relevancia como en estos tiempos de crisis ecológicas y profunda transformación económica hacia un modelo verde y neutro en carbono. La última novedad en España ha sido el anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que comenzó a tramitarse en mayo de este año coincidiendo con la presentación en el Parlamento Europeo de la Ley Europea del Clima.
En España el derecho ambiental se remonta hasta principios del siglo XX, cuando se aprobó la primera Ley de Parques Nacionales. En 1918 se declararon los primeros parques nacionales españoles: el de Ordesa y el de la Montaña en Covadonga. Pero desde ese primer momento clave para la legislación ambiental podemos contar muchas más normas pensadas para salvaguardar los espacios naturales y sus recursos. Estas son algunas de las más importantes: