Circular Economy Hotspot es una iniciativa europea que organizó el gobierno de Cataluña, del 15 al 18 de noviembre de este año, con el objetivo de dar a conocer los mejores casos de éxito circulares de esta comunidad a través de una serie de visitas organizadas a empresas y organizaciones. El objetivo de dichas visitas fue ver in situ actuaciones empresariales y proyectos de I+D en marcha, así como estrategias gubernamentales y, en general, cualquier tipo de acción que contribuyese a la transformación de la economía hacia una mayor circularidad.
Nueve sectores
Circular Economy Hotspot Catalonia incluyó a nueve sectores que, atendiendo a la heterogeneidad de la iniciativa, son muy diversos: industria agroalimentaria, moda y textil, energía, movilidad, construcción, packaging, ciclo del agua, química, e iniciativas públicas.
En el primer sector, las visitas dirigieron al hub agroalimentario situado en Lleida y también a la cadena de valor del vino, de la mano del clúster vitivinícola catalán en la comarca del Penedès, así como al mercado mayorista de productos bio más grande de Europa, situado en Barcelona ciudad. En este último lugar se dio relieve a cuestiones como el desperdicio alimentario, el aprovechamiento de los subproductos y la gestión integral de agua, energía y residuos.
En el textil se prestó atención a la producción de hilos reciclados provenientes de distintos materiales y a la moda circular, con especial énfasis en iniciativas empresariales y en proyectos emergentes desarrollados en centros tecnológicos catalanes. En relación a la energía, se propuso un recorrido que incluyó la instalación de geotermia del Hospital de Sant Pau en Barcelona, diversas empresas del sector del papel que están aplicando la circularidad en sus procesos, y el reconocido proyecto municipal Rubí Brilla de la ciudad de Rubí (Barcelona).
En el recorrido de la movilidad participaron, entre otras, las dos mayores empresas que prestan servicio de transporte público en el área metropolitana: Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) y Transports Municipals de Barcelona (TMB).
También se visitó el CREVE, un centro pionero, situado en Santa Perpètua de Mogoda, pensado para dar servicios en las tecnologías del vehículo eléctrico ligero y, más específicamente, para ofrecer al tejido empresarial del territorio cercano recursos útiles para la promoción de nuevas líneas de negocio relacionadas con este tipo de vehículo.
El ámbito de la construcción fue propicio a la visita de edificios circulares y empresas de materiales constructivos situados en Barcelona y en Montcada i Reixac y al centro de vanguardia en este campo Valldaura Lab del Insitute for Advanced Architecture of Catalonia.
El packaging permitió descubrir dos industrias punteras que están transformando el sector de los envases y el embalaje con nuevos materiales, estrategias de ecodiseño y el desarrollo de tecnologías digitales para el reciclaje y el smart packaging, así como el centro de investigación de tecnologías industriales Leitat, situado en Terrassa.
Igualmente, se pudieron ver estrategias de circularidad aplicadas al ciclo del agua, con visitas a infraestructuras públicas y privadas de desalinización, reutilización y control de la distribución del agua en el área metropolitana, así como al Instituto de Diagnóstico ambiental y estudios del agua dependiente del CSIC.
En el terreno de la química, las visitas se dirigieron a Tarragona, polo indiscutible de actividad del sector y, concretamente, a empresas que están dando prioridad a aspectos como el ahorro de recursos, la reducción del impacto ambiental, la valorización de residuos y la síntesis de plásticos y materiales circulares.
Iniciativas públicas
Circular Economy Hotspot Catalonia se completó con un recorrido por un conjunto de iniciativas públicas que, en algunos casos, abarcan la colaboración entre municipios e iniciativas público-privadas. Entre ellas: Els Encants de Viladecans, un mercado de segunda mano promovido por el ayuntamiento de esta localidad; la campaña Millor que nou, pensada por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) para alargar la vida de los objetos; o las iniciativas circulares de la Autoridad Portuaria de Barcelona.
Esta quinta edición se ha celebrado anteriormente en Holanda, Luxemburgo, Escocia, y Bélgica, con el objetivo de compartir experiencias y estrategias sobre economía circular. Y es que Cataluña acoge actualmente unas 400 empresas que ofrecen soluciones circulares, la mitad de las cuales son exportadoras.