¿Cómo será el transporte de las ciudades inteligentes?
30/12/2022

En el siglo XX existía el convencimiento de que la llegada del nuevo milenio traería consigo nuevas fórmulas del transporte y, en ese contexto, los coches voladores eran un elemento de movilidad completamente asimilado en el imaginario colectivo.

Comenzado ya el siglo XXI podemos afirmar que los coches voladores existen, pero nuestra diaria movilidad sigue pegada al asfalto, y es en este contexto en el que se plantean innovaciones que van dirigidas a descongestionar el tráfico de las grandes ciudades y reducir los niveles de contaminación.

El futuro es ahora

La movilidad en las grandes ciudades se ha convertido en un auténtico reto tanto para los ciudadanos como para los ayuntamientos. Las grandes distancias requieren el uso de vehículos (públicos y privados), pero la manera en que se masifican estos núcleos de población hace que el volumen de tráfico sea un problema de movilidad y medioambiental. ¿Cómo deshacer este círculo vicioso? Según un estudio realizado por Deloitte acerca de tendencias de movilidad en Smart cities, las necesidades de las ciudades del futuro enfrentan tres grandes retos:

Rediseñando el transporte en las ciudades

La nueva movilidad urbana se rediseña teniendo en cuenta el valor que aportan las nuevas tecnologías y manteniendo en el horizonte el reto del cambio climático, que hasta la fecha ha encontrado en el transporte su mayor amenaza (solo en nuestro país el transporte es responsable del 293% de las emisiones de gases de efecto invernadero). Esto ha determinado varias tendencias muy claras que ya son una realidad en ciudades como Shanghái o Berlín y que poco a poco están modificando el parque móvil urbano de multitud de ciudades:

La suma de todos estos factores contribuirá a desarrollar una movilidad diversa basada en las necesidades reales y los hábitos de la ciudadanía, al mismo tiempo que facilita la planificación del tráfico y permite alcanzar una movilidad más sostenible.