Biodiseño y biomímesis
05/05/2023

El diseño se presenta como una disciplina puntera de la que se nutren la industria, la ingeniería, la arquitectura… para lograr que un producto sea a la vez útil y atractivo. Pero, si analizamos la historia, nos encontramos con que muchos de los problemas hemos enfrentado (y enfrentaremos) yahan sido resueltos por organismos y ecosistemas a lo largo de su evolución, ofreciendo soluciones eficientes, funcionales y sostenibles. El biodiseño nos anima a volver la vista a la naturaleza en busca de soluciones.  

Qué es el biodiseño 

La historia del biodiseño se remonta a los orígenes de la humanidad: el hombre, consciente e inconscientemente, ha empleado la naturaleza como modelo a seguir y ha adoptado sus principios para crear y dar soluciones a muchos de sus problemas cotidianos basándose en principios mecánicos y analogías naturales. 

En primera instancia, la naturaleza se tomó como referencia para elaborar herramientas y ornamentos: las herramientas de caza tomaban como referencia los colmillos de animales carnívoros, y simplemente, la indumentaria de nuestros antepasados, realizada con pieles, replicaba el sistema de abrigo de los animales. 

El historiador George Basalla, menciona con el nombre de “naturfactos” a los primeros objetos y utensilios que se desarrollaron a partir de la imitación y observación de diversos elementos de la naturaleza, pero el primer ejemplo de biodiseño documentado lo encontramos en el siglo XIX con el diseño de la alambrada, que tomaba como referencia el seto de espino. 

El desarrollo intelectual y técnico han permitido llevar el biodiseño a niveles impensables, gracias a la observación de procesos naturales a nivel macroscópico, microscópicos o incluso molecular, obtenemos nuevos referentes y soluciones, como por ejemplo, las larvas que pueden degradar el poliestireno.  La cepa de una bacteria localizada en su intestino ha demostrado tener la capacidad de crecer directamente en la superficie del poliestireno y descomponerlo gracias a una enzima, lo que ha abierto la vía para investigar una fórmula para descomponer y reciclar el poliestireno residual basándose en la bacteria o la enzima. 

Biomímesis 

La biomímesis lleva el biodiseño un punto más allá y lo hace ecológico: toma como referencia las ventajas evolutivasde elementos de la naturaleza, desde los sistemas mecánicos hasta los procesos internos, y los emplea en el diseño, elaboración e implementación de nuevos productos, que resuelvan necesidades específicas, (o incluso contribuyen a perfeccionar objetos o sistemas existentes), manteniendo la premisa de que además su impacto medioambiental sea positivo. 

En la naturaleza, la forma y la función se influencian y se modifican buscando la optimización de los recursos, esta es la clave para los diseñadores biomiméticos, que toman la naturaleza como referente formal, funcional, estético o mecánico para resolver problemas. 

En la actualidad, la biomímesis ha alcanzado cotas más complejas: encontramos ejemplos en el ámbito de la medicina como el brazo o mano biónicos. O en ingeniería, en el rediseño del tren bala japonés.  

Y en concreto, podemos aplicar la biomímesis desde dos puntos de partida. Por una parte, nos podemos encontrar ante un problema de diseño o una necesidad específica, y ante esta circunstancia observar la naturaleza en busca de soluciones. La idea es detectar si algún organismo o ecosistema, en particular, ya se ha visto ante esa situación o una parecida y observar de qué modo lo ha solventado. Esto es lo que se conoce como diseño mirando a la biología (Design looking to biology). 

Por otra parte, nos podemos encontrar con que una característica particular, comportamiento o función de un organismo o ecosistema puede resultar útil, por tanto, se traslada este conocimiento al campo del diseño tratando de darle una aplicación práctica. Este segundo caso es conocido como biología influenciando el diseño (Biology influencing design).  

La clave de la sostenibilidad 

La biomímesis se revela como una herramienta esencial en el desarrollo de soluciones que nos ayuden a llevar un modo de vida más sostenible. La naturaleza cuenta con millones de ciclos perfectamente coordinados en los que todose autorregula, nada se pierde y todo se recicla. Ciclos que además hacen posible la vida en condiciones extremas, desde selvas tropicales a desiertos. 

Observar estos modelos para mejorar nuestros modos de vida o para aportar alternativas a soluciones vigentes que son contaminantes y/o dañinas para el medioambiente es esencial. En este sentido, el diseño ha de dar respuesta a tres aspectos:  

Los elementos naturales han pasado por un proceso de selección que ha generado sistemas equilibrados y eficientes en donde lo estético, lo funcional y la economía de los recursos coexisten en armonía. La biomímesis nos ofrece una gran oportunidad de innovación social, medioambiental y económica usando estrategias que están al alcance de nuestra mano. Al fin y al cabo, los 3.800 millones de años que lleva la naturaleza demostrando su eficiencia y sostenibilidad deben servirnos como garantía.