Uno de los principales recursos que facilita y propicia generar desarrollo sostenible y crecimiento en un país es, sin lugar a dudas, la investigación científica. A lo largo de la historia hemos visto cómo, en multitud de ocasiones, la inversión en I+D+i (Investigación, desarrollo e innovación) ha posibilitado avanzar como sociedad e incluso erradicar algunos de los problemas más preocupantes a los que nos hemos tenido que enfrentar. Los antibióticos, los electrodomésticos, la conquista espacial, los medios de comunicación y la teoría de la relatividad son sólo algunos ejemplos de cómo los avances científicos han revolucionado la humanidad.
Qué es el programa Horizonte
En Europa, la I+D+i se ha fomentado en los últimos años con herramientas como Horizonte 2020, que favorece el progreso basado en la ciencia en los Estados miembro de la Unión Europea a través de la financiación e impulsa nuevas conexiones entre investigadores, empresas, centros tecnológicos y entidades públicas de los países. En este sentido, Horizonte 2020 sirve también como un instrumento para acercar la cultura de las naciones que componen Europa y hacer del continente uno más sólido y unido pese —o gracias— a su diversidad, visible también en el ámbito del conocimiento.
Dotado con casi 80.000 millones de euros para el período 2014-2020, la misión de Horizonte 2020 ha sido, en última instancia, apoyar la excelencia científica en Europa y hasta la fecha ha contribuido a avances científicos tan relevantes como el descubrimiento de exoplanetas, las primeras imágenes de un agujero negro y el desarrollo de vacunas avanzadas para enfermedades como el ébola.
En el tramo final del programa, la Comisión Europea ha decidido centrarse en temas considerados vitales para la seguridad del planeta, como el cambio climático, la energía limpia, los plásticos, la ciberseguridad y la economía digital; y orientarse hacia la configuración del futuro panorama de investigación e innovación, al preparar el camino para Horizonte Europa 2021-2027.
Para Carlos Moedas, Comisario de Investigación, Ciencia e Innovación, este programa está generando nuevos conocimientos y tecnologías, además de tener un fuerte impacto económico. “Por cada 100 euros que invertimos a través de Horizonte 2020, esperamos agregar 850 euros a nuestro PIB para 2030, creando millones de empleos para los europeos. Es por eso que hemos propuesto 100.000 millones de euros para el próximo programa Horizon Europe, para impulsar la competitividad, las capacidades de innovación y la excelencia científica de la UE”.
Novedades que la Comisión anunció el pasado 2 de julio:
- La creación del Consejo Europeo de Innovación, cuya finalidad es convertir la ciencia en un nuevo negocio y acelerar la expansión de las empresas. Actualmente se está ejecutando la fase piloto y, en 2020, se beneficiará de un presupuesto de 1.200 millones de euros.
- Un presupuesto de 206 millones de euros destinado a proyectos para transformar sectores que tradicionalmente consumen mucha energía en industrias competitivas, bajas en carbono y circulares, y para reducir significativamente su huella ambiental.
- El apoyo, con 132 millones de euros, al desarrollo y la producción en Europa de la próxima generación de baterías, como parte del impulso hacia un futuro bajo en carbono y resistente al clima.
- La contribución a la Estrategia de Plásticos de la UE, a través de la incorporación de diez nuevos temas sobre plásticos, con un presupuesto total de 135 millones de euros.
- El respaldo de la inteligencia artificial, núcleo de los avances más prometedores en la actualidad, con un presupuesto de 396 millones de euros.
- El desarrollo de nuevas capacidades para combatir y prevenir la ciberdelincuencia, que contará con 116 millones de euros.
Así es como quedaría el panorama de cara a la recta final de este programa. Horizonte 2020 continuará financiando la «ciencia basada en la curiosidad» —a menudo denominada «ciencia del cielo azul» o «investigación de la frontera”—, por ejemplo, con las acciones Marie Skłodowska-Curie, que sufragan becas para investigadores en todas las etapas de sus carreras, o el EIC Accelerator pilot, un modelo de financiación de donación y capital mixto.
También se invertirá más de 550 millones de euros en mejorar la cooperación internacional, por ejemplo trabajando con África en salud global, seguridad alimentaria y nutricional; con EE.UU. Canadá y Japón, en energía limpia; y, con China, en producción de alimentos, biotecnología, energía, recursos naturales y urbanización.
Y, anticipándose a la estructura y contenido de Horizonte Europa, 209 millones de euros servirán para llevar a cabo acciones sobre alimentos y recursos naturales. Los métodos y enfoques de co-creación se están probando a través de convocatorias transversales sobre desafíos interdisciplinarios como Competitive, Low Carbon y Circular Industries.
