¿Qué es un banco de conservación de la naturaleza?
18/05/2021

Es una idea genial para compensar los daños que se infringen al medio natural cuando el hombre acomete proyectos, desarrollos y obras. El capital natural se transforma en créditos ambientales con los que se comercia.

El mecanismo de los bancos de naturaleza o de hábitat es muy parecido al del mercado de emisiones de carbono. La Fundación Biodiversidad los define como “un mercado en el que los créditos de las acciones con resultados beneficiosos de la biodiversidad se pueden comprar para compensar el débito de los daños ambientales”.

En otras palabras, “se emplea para compensar los impactos negativos que se producen sobre los recursos naturales como consecuencia de la actividad económica”, como dice Ecoacsa Reserva de la Biodiversidad. Ahora bien, antes de todo, existe una “jerarquía de mitigación” y antes de compensar impactos se debe evitarlos y minimizarlos.

La creación de un banco de hábitat responde a un plan de desarrollo territorial. Es decir, para empezar, se elige un terreno por su potencial ecológico. Ecoacsa pone como ejemplo el de un terreno en el que viven dos parejas de águila perdiceras, pero en el que en realidad pueden instalarse cinco ¿Por qué no adoptar medidas para que así sea?

Para implementar estas medidas, que se llaman Plan de Gestiónes necesario obtener financiación, para lo que se buscar un promotor y recursos legales que se denominan servidumbre de conservación.

A partir de ahí, todo el que quiera actuar de alguna manera en este territorio, como puede ser el caso de instalaciones de energías renovables, actuaciones medioambientales de empresas como parte de su estrategia de responsabilidad social corporativa o proyectos empresariales de economía verde, no podrán hacerlo sin comprar los correspondientes créditos ambientales, explican las mismas fuentes.

Para que todo este proceso salga adelante, salga bien y se perpetúe y respete en el tiempo se ha creado la figura de las “entidades de custodia”, que normalmente son organizaciones conservacionistas y ONG.

Los créditos ambientales de un banco de hábitat pueden ser tanto para creación de un hábitat como para su mejora, restauración o conservación. En cualquier caso, el banco de hábitat creado tiene que enclavarse en la región donde se ha impactado y se puede hacer con anterioridad a la acción que ha causado este impacto.

Como ves ¡hay muchas fórmulas para que, entre todos, a través de la cooperación, podamos cuidar del Planeta!